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domingo, 31 de octubre de 2010

Conectados con el Universo

El 10 de septiembre de 2009, en mi sección favorita del diario La Vanguardia - La contra- , leí un artículo en el que Alfred Webre afirmaba que existen otras civilizaciones no humanas en Marte,  que conviven también con otras especies animales, una civilización mucho más avanzada desde un punto de vista ético y de sostenibilidad. Parece ser, según A. Webre,  que son civilizaciones y seres mucho más evolucionados con una gran tecnología punta y un alto grado de concienciación por el resto de seres vivos que compartimos un espacio-tiempo en el Universo. Cabe añadir que, según leí, estos extraterrestres que viven bajo la superficie de Marte, no son la única existente.
Alfred Webre es autor, futurista, abogado, activista de paz y del medio ambiente, y activista del espacio que se conoce como el padre fundador de exopolitics. Webre fue Director en 1977 de un proyecto de comunicación extraterrestre de la Casa Blanca como futurista en Stanford Research Institute. Hoy en día, Webre es el Director Internacional del Instituto para la Cooperación en el Espacio (ICIS), donde promueve una visión de la prohibición de armas en el espacio y el estudio de la vida en el Universo. Webre ha trabajado durante años para evitar la militarización del espacio con el fin de sembrar un halo de paz entre posibles civilizaciones y la nuestra. Sin embargo, los humanos siempre pensamos en armas e invasiones. Con esta breve descripción de su trayectoria profesional, creo que todos podemos hacernos una idea de los credenciales de  Alfred Webre.

domingo, 24 de octubre de 2010

El cristal con el que miramos


Cuando sentimos la libertad dentro de nosotros mismos, nos damos cuenta de lo importante que es la libertad de encontrarnos con nuestras emociones más positivas, sólo ellas nos muestran con certeza cuál es el propósito de nuestras vidas. Sólo ellas nos pondrán en armonía con el resto de nuestro entorno, y sólo ellas nos harán ser felices en cada una de las decisiones tomadas y de las experiencias vividas.

Por la inercia de nuestra rutina, día tras día, cometemos el error de no reflexionar sobre lo que anhelamos, sobre todo aquello que nos motiva, que nos hace latir el corazón con más fuerza, que nos hace sonreír cuando no estamos hablando con nadie o caminos por la calle dirección al trabajo o a cualquier otro lugar. Día tras día, nos perdemos en lamentaciones y nos olvidamos de reírnos de nosotros mismos y de muchas circunstancias y situaciones que vemos como negativas cuando, realmente, deberíamos entenderlas como una ironía, también como lecciones que la vida nos muestra como parte intrínseca de nuestro aprendizaje.

domingo, 17 de octubre de 2010

Nacer para morir

Campos de concentración clandestinos sumidos en el más triste de los silencios, en ocasiones interrumpidos por los alaridos del sufrimiento vivido bajo el yugo de un hombre que, en nombre de la ciencia y del progreso-¿qué progreso?- viven muchos seres a diario sin que sean oídos por nadie que pueda socorrerlos, alaridos que se pierden en el tiempo y el espacio de unas habitaciones oscuras, grises, llenas de dolor. Los alaridos que son crónica de una muerte segura, de una muerte vecina a sus vidas. Barbarie en toda regla.



martes, 12 de octubre de 2010

Reflexión de un 12 de octubre

Dicen que no hay nada más cierto que lo propio que uno ve, las convicciones con las que vivimos van forjando nuestros principios como personas, pero ¿cuántos principios son los que van conformando nuestro escaparate humano?. Lo que vemos día a día en nuestra cotidianeidad es lo que nos hace ser la persona que hoy somos, porque de cada acción compartida, experimentada, cada decisión tomada, cada paso dado en nuestro avance por el camino que llamamos vida, nos forja una personalidad intrínseca como individuos.

Cada día, cuando nos levantamos, actuamos de forma inconsciente (algunos pocos de forma consciente) en base a nuestro papel en la gran obra de teatro que hemos creado para evolucionar como seres individuales. Y así vamos creando nuestra propia escala de valores y nuestro principios éticos; sin embargo, ¿cuántos de nosotros actuamos siempre de forma coherente en base a ellos?. Quiero decir, podemos querer ser mejores personas cada día que vivimos, en cambio, ¿por qué continuamos con los mismos prejuicios al respecto de las situaciones y personas que nos rodean?, ¿por qué si nuestros principios son el respeto y la tolerancia, por ejemplo, continuamos siendo intransigentes con determinadas circunstancias?, porque omitimos y relegamos a nuestro principios a vivir en un desván que sólo abrimos cuando la necesidad nos obliga o cuando nos sentimos observados por terceros que, libremente, opinarán de nuestros actos y de nuestras palabras; es entonces sólo cuando actuamos en consecuencia de nuestros propios principios, el resto del tiempo lo pasamos dejándonos llevar por la inercia de nuestro día a día sin detenernos a reflexionar apenas sobre nuestros pasos andados desde que nos desperezamos cuando sonó el despertador y hasta que, después de un cansado día de trabajo, volvemos a meternos en la cama, momento en el que, siguiendo la línea de inercia, dejamos que los pensamientos se agolpen en nuestro cerebro dejando que la mente nos domine en lugar de marcar distancia y ser nosotros el depredador que somete a nuestra mente dirigiéndola hacia nuestro bienestar emocional y físico. ¿Inteligencia? Para nada, más bien desidia de nosotros mismos y de nuestro andar. Desperdiciando los días y con ellos, las oportunidades de mejorar. Reaccionemos, nunca es tarde para ello.

Algunos dicen que el destino está escrito, yo digo que lo creamos a medida que vivimos y tomamos decisiones, a medida que elegimos y a medida que aprendemos. Pero para los que sigan opinando que el destino está escrito, yo les digo lo siguiente: sáltate el guión.

El origen del camino

Empezar no es fácil, nunca lo ha sido, sin embargo, todo tiene un principio, por eso, siempre cuando se empieza, todo resulta difícil, sólo la constancia y nuestra convicción en lo que hacemos nos dará el resultado que esperamos si no nos falta la confianza en nosotros mismos.
Deseo que experimentes paz interior cada día de tu vida, deseo que llenes tus mañanas de buenos pensamientos y tus noches de sabias reflexiones y bellos recuerdos. Deseo que mires al sol con tus ojos y sientas su calor en tu corazón, que te atrevas a salir a buscar tus sueños, que abras todas tus puertas al Universo, que dejes que entre y te invada la magia de la vida que has decidido vivir, que experimentes la libertad del valor y la fuerza de la confianza en ti mismo.
Deseo que sepas ver que estás en el momento exacto en el que debes estar, que refuerces cada día y consolides la confianza en tu interior y seas capaz de ver las posibilidades infinitas que nacen de esa confianza en ti mismo. Deseo que dejes que esta sabiduría se aposente en tus huesos, en tu mente y en tu corazón y que tengas el coraje necesario para actuar en consecuencia. Deseo que seas feliz, todos los días de tu vida.
Tu corazón es libre, ten el valor de hacerle caso. Sal a buscar tu verdad, quizás en tu camino, tengas la fortuna de encontrarte de frente con Scarlata.